¿Si pusiera dentro de un saco mi timidez, la incomodidad, la manera en que mi cuerpo se agacha y retuerce cuando me rechazan, los deseos más asquerosos (esos que se escurren de la nariz como filamentos marrones, fosforecentes), los pensamientos grasosos que quieren arrastrarse sobre las personas y poseerlos, manipularlos, someterlos, y los mezclara con unas cuantas cucharadas con una botella original de “imaginación Tim Burton, qué clase de monstruo saldría?
Yo sería un gusano inmenso, gordísimo, con masas y masas de carne formando llantas llenas de venas multicolores. Me arrastraría muy lento y tendría unos largos, amarillos y oxidados colmillos de morsa y una pequeñas manitas, tipo tiranosaurio rex, que me servirían para arrancar frutos de los árboles cuando me pudiera enderezar. Dejaría una estela de sangre negra pegada al pavimento y, en determinados días, bajo el sol o si me acercaran una lámpara de luz negra, podrían ver a través de mi carne un montón de pensamientos desordenados, de suspiros echados a perder y a un ejercito de pequeñas ratas cafés peleándose unas contra otras, intentando succionar con sus trompas el jugo de las pocas frutas que llegarían hasta ellos. Además, sólo dentro de mi cueva, me aficionaría a pincharme la carne para disfrutar de ese exquisito olor que saldría de mis poros – ¡mi único placer!- : una combinación muy dulce de duraznos podridos y aliento de hocico de perro.
Hace un par de semanas, con mi pesado cuerpo, me abrí paso entre los centenares de monstruos que abarrotaron la sala de exposiciones del LACMA, en un gran y ordenado museo, no pensado para creaturas como nosotras. Me reconocí en todos los dibujos, borradores, storyboards, esculturas y cortometrajes de Tim Burton, el artista Californiano, nacido en Burbank en 1958. ¡El lugar era un infierno! Todos intentaban disimular pero la peste de sus corazas agrietadas y sus bigotes rancios, hechos de insectos, llenaban el aire del lugar y se reflejaban en los muros de museo.
Ale dice
Yo sería un gusano inmenso, gordísimo, con masas y masas de carne formando llantas llenas de venas multicolores. Me arrastraría muy lento y tendría unos largos, amarillos y oxidados colmillos de morsa y una pequeñas manitas, tipo tiranosaurio rex, que me servirían para arrancar frutos de los árboles cuando me pudiera enderezar. Dejaría una estela de sangre negra pegada al pavimento y, en determinados días, bajo el sol o si me acercaran una lámpara de luz negra, podrían ver a través de mi carne un montón de pensamientos desordenados, de suspiros echados a perder y a un ejercito de pequeñas ratas cafés peleándose unas contra otras, intentando succionar con sus trompas el jugo de las pocas frutas que llegarían hasta ellos. Además, sólo dentro de mi cueva, me aficionaría a pincharme la carne para disfrutar de ese exquisito olor que saldría de mis poros – ¡mi único placer!- : una combinación muy dulce de duraznos podridos y aliento de hocico de perro.
Pauline dice
Yo seria una mariposa, pero en vez de tener alas bonitas, tendría unas que parecerían manos que serian feisimas cerradas y abiertas casi bonitas, que reflejaran esas ganas de tenerlo todo y controlarlo todo, sin una razón lógica y coherente, así como seria el egoísmo si tuviese una imagen para definirlo; en vez de alimentarme del néctar de las flores, tomaría agua como alcohol para borrar todo lo que he tenido y he desperdiciado y borrar lo que todavía tengo y no se como librarme de ello, con una lengua azul tomando mas agua que viviendo para lavar mi mente y mi conciencia de recuerdos y porque no de vida, tendría ojos multicolores que inclusive llamarían mas la atención que mis alas y refrescarían la vista de quienes me observaran, y bajo un microscopio viendo bien mi cuerpo y mis alas un montón de palabras que amare y odiare y que serán el reflejo de mi vida y se irán añadiendo una a una mientras adquiero experiencia, claro todas mis patitas y antenas serán las mas bonitas; porque seria un monstruo chica jajajaja.
Alejandro dice
Qué chido, Pauline, jeje ¡Me gustaría verte en nuestra reunión de monstruos! con esas alas y ojos multicolores, jeje! ¡Abrazos!
RAY dice
AMM MUY BUENA PAGINA YO ME CATALOGARIA COMO
RAY dice
YO ME CATALOGARIA COMO UN MURCIELAGO CON ALAS DE BABOSAS..SADIKO Y MALEVOLO ALIMENTANDOME DE LOS CORAZONES DE LOS MUERTOS DESGARRANDOLOS CON MIS COLMILLOS Y SUSCCONANDO LOS GUSANOS COMO ESPAGUETIS TENDRIA UNOS OJOS ROJIZOS UNA JORAVA EN MI ESPALDA CON MUCHOS BELLOS ESPINOZO ASIENDO DAÑO A TODO AQUEL QUE ME TOQUE CON LAS PUNTAS LLENAS DE VENENO UNOS HOJOS PROFUNDOS ROJIZOS CAPAZ DE MANIPULAR A TODO AQUEL QUE SEA CAPAZ DE VERME,UNOS COLMMILLOS DE 12 CM DE LARGO UN ESTOMAGO COMO EL DE UN SAPO QUE SE INFLA AL RESPIRAR Y SUSPIRR EL OSCURO VIENTO DE LOS SEMENTERIOS SIEMPRE CON GANAS DE SACIAR MI HAMBRE DE LOS MALOS MUERTOS EN VIDA….:s se siente bien
Anónimo dice
Jeje, ¡sí, se siente bien! En especial me gusta eso de las alas babosas y el estómago que se infla como el de un sapo.
Saludos y bienvenido a este blog.
Chacomaco dice
Excelente artículo, deberiamos financiarte para que salieras mas seguido a cubrir exposiciones tan CHINGONAS como la Tim Burton.
Por mi lado yo sería un monstruo:
Si me observaras de lado apenas podrías percibirme por mi delgadez mi estructura es como de un insecto palo, con la cabez de brocoli, mi sanger sería etilica y color negro con dorado, mis dientes son filosos pero se caen todas las noches dejando mi paladar pareceido al de un anciano, mi cabeza de brocoli tiraría esporas si la tocaras, en mis axilas crecerían helechos de hoja redonda y llevaría patines en mis pies para huir torpemente de mi enemigos. Mi capacidad mas extraordinaria seria que genero un implosión cada 48 hrs. a tal grado que quedo del tamaño de un virus y vago en mis pensamientos durante 48 hrs. en el ambiente junto con las partículas de polvo. Mis ojos son grandes como un lemúrido, y transparentes y brillantes como las canicas, estos ojos serian sujetados por dos lobos negros que habitan en mi cabeza uno es el miedo y el otro las deseperanza, así que cuando me vean a los ojos pueden percibir luz y obscuridad.
Anónimo dice
¡Wow! Me encantó tu descripción. Lo de la implosión y los ojos transparentes- Te imagino exacto, con los patines y el cuerpo y las axilas. Tú que dibujas chido deverías hacer la ilustración… neta
Lydia dice
¡Hola Gutria!, te cuento que yo
sería un monstruo de plastilina de colores revueltos que se podría convertir en
algo diferente, dependiendo de la época y las personas a las que quisiera asustar,
pero en el fondo, sería buena onda y nada más espantaría a la gente malvada
para darles un gran shock que los ayudara a reformarse.
Anónimo dice
¡Jeje, cochina monstruoa de plastilina, me gustaría que nos juntaramos en nuestra faceta de monstruos y darte muchos besos de busano, jajaja!